El objetivo de la misión fue llevar a los hogares la Palabra de Dios, compartirla y vivirla, siguiendo los pasos de la Lectio Divina.
Lo más impresionante de la misión, fue conocer la sed de la Palabra que tiene la comunidad. En todos los grupos se expresó la gran alegría que tenían de que por fin, la Iglesia Católica llegara a las casas también.
Carrosas |
De hecho, pidieron un grupo apostólico específico que siguiese haciendo la Lectio Divina en las casas, incluso se formaron uno en uno de los sectores.
Además, los frutos de la misión fueron muchos, pues se animó a muchas familias que les hacía falta sacramentos, y se recibieron alrededor de cuarenta solicitudes.
El día de la clausura, tuvimos una procesión, con carrosas elaboradas por los miembros de cada sector, y adornadas según un tema bíblico que se les asignó. Después tuvimos la celebración de la Eucaristía, presidida por Fray Amado ( quien fue la cabeza y animador de esta misión).
Finalmente, los Misioneros Apóstoles de la Palabra dirigieron una convivencia con cantos, sociodramas sobre la Biblia y un concurso de preguntas bíblicas, que tenía como premio una Biblia Católica.
Apóstoles de la palabra |